Bienvenidos al blog "El espacio de la contemplación" con el que pretendemos dar nuestra visión sobre varias obras importantes del teatro español, así como de tres obras a las que hemos asistido a su representación: 10 euros la copa, El tipo de al lado, Sombras de amor prohibido. Esperemos que os guste.
viernes, 31 de mayo de 2013
Vídeo de "10 euros la copa"
El siguiente enlace muestra una página web en la que hay un vídeo de una parte de la obra.
http://2012.11500elpuerto.es/2012/08/20/10-euros-la-copa-una-gran-noche-de-teatro-en-el-pedro-munoz-seca/
Don Juan Tenorio de José Zorrilla
Aunque algunos lo niegan sin
alegar razones convincentes, Zorrilla tuvo que conocer El burlador de Sevilla. Allí aprendió sin duda la retórica amorosa
del seductor que sabe adornar su discurso de bellas y engañosas palabras. Allí supo
de un doble de Don Juan, el Marqués de la Mota, que servía para contrastar la
autenticidad de conducta del primero frente a la duplicidad del segundo. Allí observó
cartas y recados, mujeres que cedían a la pasión o al instinto, dueñas y
criados entrometidos. Y, sobre todo, allí descubrió el valor de la dinamicidad
dramática, a base de acciones rápidas, diálogos cortados, gestos arrogantes,
muertes súbitas.
Lo que Zorrilla debe
fundamentalmente a Tirso de Molina y a Zamora, aparte de los nombres de casi
todos los personajes, son los componentes esenciales del mito. Se ha señalado
que, desde un punto de vista estructural, son necesarios tres elementos para la
existencia de un Don Juan: un personaje licencioso, mujeriego, burlador, impío;
un muerto importante con invitación mutua de asesino y asesinado a cenar; un
grupo de mujeres, dentro del cual es esencial la hija del muerto. Zorrilla,
como tantos otros, aprendió en los dramaturgos españoles el esquema básico sin
el cual su Don Juan Tenorio no sería tal.
Zorrilla ha construido a Don
Juan Tenorio con una arquitectura firme y bien trabada. La división que hizo de
la obra en dos partes ha despistado un tanto a la crítica en cuanto a ello,
porque en realidad hay tres. Separando lo que en otros dramas donjuanescos
suele confundirse, se desarrolla en cada una un aspecto del personaje. Los actos
I y II de la primera parte constituyen una unidad cuyo tema es el burlador, un
Don Juan que consigue a la mujer con engaño, en este caso suplantando la
personalidad de don Luis. Los actos III y IV están dedicados al estudio del seductor,
un Don Juan que se apoya en diversos recursos, no solo el lenguaje, para rendir
amorosamente a la dama. Lo que se llama segunda parte se centra en el convidado
de piedra, dando extenso desarrollo a lo que antes solía ser un apéndice más o
menos apresurado.
Esta construcción tan
elaborada contiene en sí una interpretación del donjuanismo y debe, entre otras
cosas, llevar a concluir que Zorrilla no improvisó su drama. Por otro lado,
todos los episodios han sido ordenados al modo clásico en solo dos noches, si
bien separadas de un intervalo temporal de varios años: la noche de la locura
(I y II) y del amor (III y IV), la noche de la muerte (segunda parte).
En comparación con el
personaje protagonista de Don Álvaro o la
fuerza del sino es el sentido opuesto. Don Álvaro no es un personaje
satánico y sin embargo termina suicidándose. Don Juan siendo toda la obra un
personaje satánico se salva por amor. Don Juan busca continuamente su voluntad,
su destino. Él no quiere que el destino le imponga nada y por imponer su
voluntad es capaz de apostar su vida.
Bibliografía
ZORRILLA, José. Don Juan
Tenorio. Barcelona, Crítica, 1993
jueves, 30 de mayo de 2013
El burlador de Sevilla y convidado de piedra
LA
JUSTICIA DIVINA: LOS JURAMENTOS DE DON JUAN
Don Juan engaña a las mujeres
prometiéndoles casarse con ellas. Pero además, sella esta promesa con el
juramento de cumplir su palabra. Es el juramento promisorio del derecho
y de la moral. El juramento con reserva mental es el nudo que enlaza los dos
mundos en que se polariza la comedia, representados por Don Juan y la estatua
de Don Gonzalo, por el hombre y por Dios.
Jurar,
por definición, es poner a Dios por testigo de lo que uno afirma o niega. Si se
pone a Dios por testigo de una mentira, se comete perjurio, y ello entraña
profanación de la divinidad. Tirso, como teólogo y moralista, conocía a fondo
todo el alcance y la casuística sobre el juramento, que no era privativa de los
jesuitas, sino patrimonio común de todas las escuelas.
El
juramento en falso atrae necesariamente sobre el que lo hace el castigo de
Dios, porque es profanación de la divinidad. A la luz de estos tres cortos
mandatos bíblicos, es fácil reconocer el sentido y el alcance teológico del
siguiente pasaje central de El burlador.
Don Diego amonesta a su hijo por el delito cometido en Nápoles.
Don
Diego: Mira que, aunque al parecer
Dios te consiente y aguarda,
su castigo no se tarda,
y que castigo ha de haber
para los que profanáis
su nombre, que es jüez fuerte
Dios en la muerte.
Don
Juan: ¿En la muerte?
¿Tan largo me lo fiáis?
…
… … … … … … … … … ..
Don
Diego: Pues no te vence castigo
con cuanto hago y cuanto digo,
a Dios tu castigo dejo.
(Burlador,
II, vv. 1438-1465)
Don
Juan había tratado hasta ahora de eludir con distintos subterfugios los
requisitos esenciales para la validez del juramento. A la Duquesa le había
jurado casarse con ella, pero en nombre de Octavio, y diluyendo poéticamente el
objeto de su juramento con la frase de cumplir
el dulce sí (I, v.3). A Tisbea le había jurado, pero no a ella, sino a sus
ojos (I, v. 940), y probablemente, también le había jurado que sería su esclavo de por vida (I, v. 946), otra
poetización muy trillada, que invalidaba el juramento.
Aunque
Don Juan evita el incidir en el tejido medular del juramento, cada una de sus
víctimas cree en la validez de los juramentos hechos por el burlador, y esto
basta, en la opinión de los moralistas, para que los juramentos sean válidos y
eficaces. Por considerarlo así, se entregan a Don Juan.
En
la carrera de las seducciones, el último tramo es la seducción de Aminta, la
única que se entrega, no por amor, sino
por interés.
Don
Juan: Ahora bien, dame esa mano,
y esta voluntad confirma
con ella.
Aminta:
¿Que no me engañas?
Don
Juan: Mío el engaño sería.
Aminta:
Pues jura que cumplirás
la palabra prometida.
Don
Juan: Juro a esta mano, señora,
infierno de nieve fría,
de cumplirte la palabra.
Aminta:
Jura a Dios que te maldiga,
si no la cumples.
Don
Juan: Si acaso
la palabra y la fe mía
te faltare, ruego a Dios
que a traición y alevosía
me dé muerte un hombre… (muerto.
que, vivo, Dios no permita.)
Aminta:
Pues con ese juramento
soy tu esposa.
(III,
vv. 2066-2083)
El
primer juramento exigido por Aminta no cogió a Don Juan desprevenido. Juró
ahora a la mano de Aminta, como antes había
jurado a los ojos de Tisbea, con
reticencia mental, de que le cumpliría la palabra.
Don
Juan logró engañar a Aminta, pero falló en su propósito de engañar a Dios. El juramento
tan preciso de Don Juan es la clave que explicará su caída. Con él sella su
destino sobrenatural. La intención,
revelada en el aparte de Don Juan, está en la raíz de su acción, y determina su
valor moral. En el terreno de las intenciones es donde se mueve Dios. Lo que
era para Don Juan humanamente imposible e imprevisible, era natural y normal
para Dios. Al jurar, entró Don Juan en la órbita sobrenatural y divina, y de
ella ya no podrá salir.
LA JUSTICIA HUMANA
En
su desaforada carrera, atropella Don Juan los derechos de la mujer, apenas pone
pie en la playa de Tarragona, quebrantando las leyes de la hospitalidad, al
engañar a Tisbea, que le había salvado la vida, brindando su hogar, y agasajado
con piedad y cariño. La abandona.
Al
llegar a Sevilla, traiciona a su mejor amigo, el Marqués de la Mota, como lo
había hecho antes con el Duque Octavio, su amigo de Nápoles, y mata a Don
Gonzalo que quiere cerrarle el paso, después de la abortada seducción de su
hija Doña Ana.
Camino
de Lebrija, a donde le ha exiliado el Rey, al pasar por el pueblo de Dos
Hermanas, perturba el banquete de bodas de su hija Aminta, y bajo palabra de
casamiento, profana su lecho nupcial la misma noche de sus bodas. Don Juan
justifica su conducta con el poder de su padre, el privado del Rey. Su carácter
avasallador de la justicia se refleja
en aquella máxima maquiavélica, síntesis
cínica del abuso del poder.
A
Don Juan se le tacha de traición y de
traidor veinte veces, signo de la
vileza de sus acciones. Él se ríe de todos y de todo. En esta frase se condensa
su falsa filosofía moral y social.
Bibliografía
DE MOLINA, Tirso. El burlador de Sevilla y convidado de piedra, Madrid, Alhambra, 1982
Bibliografía
DE MOLINA, Tirso. El burlador de Sevilla y convidado de piedra, Madrid, Alhambra, 1982
miércoles, 29 de mayo de 2013
"Don Juan Tenorio" (1844), de José Zorrilla
José
Zorrilla
José
Zorrilla (1817-1893) fue uno de los dramaturgos y poetas más
importantes del Romanticismo español. Nació en Valladolid, y
estudió en las Universidades de Toledo y Valladolid. Publicó
cuarenta obras, sobre todo historias nacionales (1839-1849). Fue
elegido miembro de la Real Academia Española en 1848. En 1889 fue
coronado como Poeta Laureado de España en Granada, por el Duque de
Rivas y ante la presencia de la reina Isabel II.
En
su obra teatral consiguió llegar al público, gracias a los esquemas
teatrales del Siglo de Oro español, manteniendo la intriga hasta el
final de su obra. Sus obras teatrales más destacadas son El
puñal de Godo
(1843) y Don Juan
Tenorio
(1844).
Argumento
de la obra
Se
cumple el plazo de una apuesta entre don Juan y don Luis, que
consistía en ver quién seducía a más mujeres, apuesta que gana
don Juan. Ahora una nueva apuesta moverá la obra, conquistar a doña
Inés, para lo que ambos juegan sucio y ambos son encarcelados. Aún
así, consiguen escapar, y don Juan secuestra a doña Inés; don Luis
y el padre de doña Inés, don Gonzalo, intentan salvarla, pero don
Juan los matará, y huye a Italia. A su vuelta, encuentra un cementerio
donde están los dos que asesinó y, para su sorpresa, la tumba de
doña Inés. El fantasma de don Gonzalo busca venganza, matando a don
Juan, pero a diferencia de El burlador de Sevilla,
se produce la salvación gracias al amor de doña Inés.
Estructura
En
cuanto a la estructura interna, la obra está divida en dos partes:
la primera sería desde el principio hasta que mata a don Gonzalo, y
la segunda desde la llegada al panteón hasta el final. En cuanto a
la estructura externa, está dividida en dos partes, que a su vez se
diferencian en cuatro y tres actos respectivamente:
Parte
primera:
-Acto
primero: Es el planteamiento de la obra, nos pone en situación: una
apuesta que gana don Juan y una nueva apuesta que consiste en
conquistar a doña Inés.
-Acto
segundo: Entran en acción, ambos juegan sucio y acaban encarcelados.
Al final del acto don Juan tiene un acuerdo para entrar en la casa
donde está doña Inés.
-Acto
tercero: Don Juan secuestra a doña Inés. Es el acto de la palabra
falsa y envenenada.
-Acto
cuarto: Don Gonzalo y don Luis que van a su rescate, acaban
asesinados por don Juan, y este huye a Italia.
Parte
segunda:
-Acto
primero: Cinco años después, vuelve de Italia y se encuentra en un
cementerio las tumbas de los hombres que asesinó, acompañadas de
la de doña Inés. Un escultor le cuenta la historia de lo sucedido.
Aparecen síntomas de arrepentimiento en un soliloquio del
protagonista.
-Acto
segundo: Se plantean los temas religiosos del cielo y el infierno,
de la fe y el arrepentimiento.
-Acto
tercero: A diferencia de en El
burlador,
se produce la salvación de don Juan por el amor de doña Inés, y
este se arrepiente y cree en Dios, pero dudando hasta el final.
Personajes
Estos
son los personajes más importantes de la obra:
-Don
Juan Tenorio: Joven seductor de mujeres. Cree tener el mando de su
vida, de su destino, llegándose a jugar su propia vida.
-Doña
Inés: Es una mujer religiosa, que al final consigue salvar el alma
de don Juan.
-Don
Luis: Es un jugador al igual que don Juan, pero don Juan consigue
ganarle.
-Don Gonzalo: Es el Comendador, y se preocupa por el honor de su hija doña Inés, lo que acaba llevándole a morir a manos de don Juan.
-Don Gonzalo: Es el Comendador, y se preocupa por el honor de su hija doña Inés, lo que acaba llevándole a morir a manos de don Juan.
-Ciutti:
Es un personaje histórico que encarna al gracioso de la comedia
clásica. Tiene mucha similitud con Catalinón, personaje de El
burlador de Sevilla,
ya que es también sirviente de don Juan.
-Estatua
de don Gonzalo: Quiere matar a don Juan y enviarlo al infierno, al
igual que en la obra de Tirso de Molina.
-Sombra
de doña Inés: Gracias a su amor, consigue salvar el alma de don
Juan.
-Brígida:
Es la sirvienta de doña Inés, siendo la “celestina” de la obra.
Desenlace
Don
Juan Tenorio
presenta una clara diferencia con El
burlador de Sevilla:
el final. En la obra de Tirso, don Juan muere a manos de la estatua
de don Gonzalo, representante del castigo divino. Ahora, con
Zorrilla, don Gonzalo aparece en busca de justicia queriendo matar a
don Juan y enviarlo al infierno, pero aparece el elemento de la
sombra de doña Inés, que consigue salvar el alma del protagonista.
También
presenta un desenlace diferente respecto a la mayoría de obras del Romanticismo, donde abundan los finales pesimistas y la sensación de
fatalidad del paso del tiempo. Ahora Zorrilla salva al protagonista
por la gracia y el amor de doña Inés. Esta novedad, que consiste en
el triunfo del amor y la fe religiosa sobre la moralidad, fue el
motivo del gran éxito de la obra.
Romanticismo
en la obra
Estas
son algunas características del Romanticismo en Don
Juan Tenorio:
-Los
lugares son oscuros, predomina la noche, lo tenebroso, el
cementerio...
-El
amor imposible entre don Juan y doña Inés, ya que este tiene que
huir a Italia por sus asesinatos.
-El
final, aunque con la salvación del alma, es trágico, ya que ambos
mueren.
-El
misterio, lo fantástico. Esto tiene cabida en las estatuas y las
sombras.
-Triunfo
del sentimiento sobre la razón.
Don Juan Tenorio
para Zorrilla
Zorrilla
buscaba cambiar el fin del mito de don Juan, buscarle un nuevo
significado, y para ello había que comprender al don Juan. Trata a
don Juan como una víctima de sus propias pasiones, lo que le margina
de la sociedad y le lleva a un final trágico. A diferencia de El
burlador,
que tiene un destino predeterminado, Zorrilla busca que el hombre
tenga el mando de su destino, y que pueda rectificar sobre lo que ha
hecho mal a través de la fe cristiana.
Don
Gonzalo de Ulloa muestra similitud con otro personaje del momento: el
marqués, padre de doña Leonor, en Don
Álvaro.
La diferencia es que don Gonzalo no maldice a su hija por morir a
manos del amado de ella, como sí hizo el padre de doña Leonor en Don Álvaro. Don
Gonzalo muestra comprensión por su hija, que al fin y al cabo, es lo
que más quiere.
A
través de doña Inés se representa el amor, la pasión, la fe
cristiana. Con este personaje hace algo nuevo en la literatura
española: una mujer inocente, buena, salva del destino trágico al
protagonista que actúa con malicia. El amor en ella consigue superar
todas las barreras.
Bibliografía
ZORRILLA,
José. Don Juan
Tenorio.
Barcelona, Crítica, 1993
ZORRILLA,
José. Don Juan
Tenorio. Madrid,
Espasa-Calpe, 1975
martes, 28 de mayo de 2013
Tirso de Molina y "El Burlador de Sevilla"
Tirso
de Molina
Fue
Tirso de Molina quien introdujo el mito de don Juan en la literatura
universal, gracias a la comedia El
burlador de Sevilla.
Don Juan representa lo libertino, su ley es su propia libertad
siguiendo sus instintos sexuales. Su filosofía se resume en su
propia frase: “el mayor / gusto que en mí puede haber / es burlar
a una mujer / y dejarla sin honor” (II, vv. 1310-1313).
El
teatro para Tirso de Molina
Comparte
con Lope de Vega y Calderón el gusto por los modelos clásicos
teatrales, siguiendo las normas estructurales de Lope, y lo superó
en la caracterización. Para Tirso el teatro era un instrumento para
alcanzar los fines supremos de la moral y la verdad. Es criticado por
el lenguaje de sus graciosos, un lenguaje desvergonzado; pero
realmente en todos ellos hay cabida a la dignidad y a la nobleza.
Tirso potenció al máximo el teatro, jugando con lo cómico y lo
trágico. Introdujo una nueva dimensión con el tema teológico-moral,
destacando dos de sus comedias: El
condenado por desconfiado
y El
burlador de sevilla.
El
burlador de Sevilla (1630)
La trama gira en torno
a don Juan, un joven que se deja llevar por sus instintos sexuales y
seduce y engaña a cualquier mujer que se proponga, ya sea
conquistándolas o haciéndose pasar por otro, como engañó a la
duquesa Isabela, haciéndose pasar por su novio, el duque Octavio, en
Nápoles. Huye hacia España, donde ya había actuado antes igual.
Ahora engañará a Tisbea, doña Ana y doña Arminia. Al huir después
de tantos engaños, se refugia en una Iglesia, donde tendrá un
encuentro con el difunto don Gonzalo, al que don Juan mató, con sed
de venganza. Don Gonzalo acaba matando a don Juan e impera la
afirmación”¡Quien tal hace, que tal pague!”. Una vez muerto, el
Rey establece el orden en todas las relaciones amorosas.
Estructura
La obra está dividida en tres actos:
La obra está dividida en tres actos:
-Acto
I: Don Juan, en Nápoles, engaña a Isabela y se ve obligado a huir
de Nápoles hacia España. Llega a Tarragona y se encuentra a Tisbea,
a la que seduce y engaña; la abandona y parte a Sevilla.
-Acto
II: Ahora don Juan se propone engañar a doña Ana, pero el
comendador don Gonzalo intenta evitarlo, y don Juan lo mata. Entonces
don Juan parte hacia Dos Hermanas.
-Acto
III: En Dos Hermanas, el protagonista se interpone en la boda de
Arminta y Batricio; y seduce y engaña a Armintia. Todos los
personajes buscan venganza contra don Juan. Mientras tanto, don Juan
se burla de la estatua de don Gonzalo, y quedan para cenar, donde se
cumplirá la justicia divina y don Juan muere a manos de don Gonzalo.
Personajes
Algunos de los personajes más importantes son:
-Don
Juan (hijo): Es el burlador que se ríe de toda ley. Estuvo educado
en buena familia, pero no respeta nada. Es rebelde como Segismundo en
La
vida es sueño,
pero la rebeldía de este último tiene una causa y puede
comprenderse. Ahora tenemos un personaje que se burla por no sentirse
obra divina, por no ver su vínculo social; es un burlador y un
jugador, arriesgar, quebranta la ley, tanto social como divina.
-Catalinón:
Está a servicio del burlador. Es el gracioso, y representa los
instintos básicos, el desdoblamiento del ser humano, carnal y
grosero, cuya mayor preocupación es comer y beber.
-El
rey de Castilla: Amigo del padre de don Juan, es el encargado de
ordenar las relaciones entre los enamorados.
-Don Juan Tenorio (padre): Se avergüenza de su hijo, y está a favor de que sea castigado.
-Don Juan Tenorio (padre): Se avergüenza de su hijo, y está a favor de que sea castigado.
-Octavio:
Condenado por culpa de los engaños de don Juan.
-Marqués
de la Mota: Iba a casarse con doña Ana, pero don Juan la deshonra y
mata a su padre, y se culpa al marqués.
-Don
Gonzalo de Ulloa: Es el padre de doña Ana, asesinado por don Juan,
del que se vengará. Es el convidado de piedra, representante de la
autoridad divina, muestra de otra vida y el castigo divino.
-Tisbea:
Salva a don Juan en orillas del mar, y este se lo “agradece”
engañándola.
-Isabela:
Don Juan la engañó haciéndose pasar por el duque Octavio.
-Don
Pedro Tenorio: Deja escapar de Nápoles a don Juan, su sobrino,
culpando a otro.
Temas
Los
temas principales son la justicia divina, la muerte, el amor, el
engaño, el honor y el deshonor, la soledad, los instintos
sexuales...
La
justicia divina
Don
Juan engaña a las mujeres faltando al juramento de cumplir su
palabra, un juramento que representa el enlace entre el mundo real y
el de Dios, ya que jurando se pone a Dios por testigo. Dicho
juramento falso atrae el castigo divino de Dios a través de don
Gonzalo, algo que don Diego se encarga de advertir al burlador:
DON
DIEGO: Mira
que, aunque al parecer
Dios
te consiente y te aguarda,
su
castigo no se tarda,
y
que castigo ha de haber
paro
los que profanáis
su
nombre, que es juez fuerte
Dios
en la muerte.
(Burlador,
II; vv. 1438-1445)
Don
Juan responde a don Diego con usa frase repetida más veces en la
obra: “¿Tan
largo me lo fiáis?”.
Con esta frase desafía a la justicia divina.
Metáfora
del fuego
La metáfora del fuego aparece a lo largo de toda la
obra. Aquí tenemos la frecuencia de palabras relacionadas con esta
metáfora: fuego (24 veces), abrasar(se) (18), quemar(se) (4),
arderse (2), ardiente (1), llamas (2), infierno (4) y rayos (3). Se
intensifica en la seducción a Tisbea, y en menor media en las
seducciones a doña Ana y Aminta. Tisbea fue la única mujer que amó
a don Juan, y la única por la que don Juan sentía verdadera
atracción; por lo que entre ellos se enciende el fuego de la pasión.
Esto se ve en estos versos de Tisbea: “Venís formado de agua, / y
estáis preñado de fuego, / y si mojado abrasáis, / estando enjuto,
¿que haréis?”, a lo que don Juan responde: “Siendo de nieve,
abrasáis.”. En Tisbea apreciamos tanto el fuego de la pasión como
el del dolor.
Autoría
discutida
Se atribuye tradicionalmente a Tirso de Molina,
conservándose una publicación de 1630, pero tiene como precedente
la versión conocida Tan largo me lo fiáis, representada en
1617 por la compañía de Jerónimo Sánchez. Alfredo Rodríguez
López-Vázquez señala al dramaturgo Andrés de Claramonte como
autor en función de pruebas de métrica, estilo e historia. Otros
autores defienden que ambas representaciones tienen en común el
arquetipo de El Burlador de Sevilla escrito por Tirso entre
1612 y 1625. A continuación os dejo un enlace sobre la autoría de
esta obra.
http://cvc.cervantes.es/literatura/criticon/PDF/040/040_007.pdf
Bibliografía
DE MOLINA, Tirso. El burlador de Sevilla y convidado de piedra, Madrid, Alhambra, 1982
Bibliografía
DE MOLINA, Tirso. El burlador de Sevilla y convidado de piedra, Madrid, Alhambra, 1982
Entrevista de los autores de la obra "Sombras de amor prohibido"
Aquí os dejo una entrevista a los actores y al director de la obra "Sombras de amor prohibido"
lunes, 27 de mayo de 2013
Pedro Calderón de la barca y "La vida es sueño"
Biografía
Pedro
Calderón de la Barca nació el 17 de enero de 1600 en Madrid, en el
seno de una familia hidalga. A los ocho años ingresó en el Colegio
Imperial de los jesuitas. Su carácter reflexivo, tímido,
melancólico y retraído incrementó al morir su madre, en 1610.
Nunca se llevó bien con su padre, lo que se ve reflejado en la
imagen negativa de la paternidad, que preside la casi totalidad de
sus obras dramáticas. En 1614 ingresó en la Universidad de Alcalá,
y en 1617 pasó a la de Salamanca, donde estudió Derecho, Historia,
Filosofía y Teología. En 1621 abandonó la carrera y regresó a
Madrid, donde pasaría al servicio del duque de Frías. En su
compañía viaja por Flandes e Italia, conociendo de cerca el
ambiente cortesano y a los personajes más influyentes de la época.
Escribe sus primeras comedias en estos años, alcanzando tal fama
que, en 1637, es nombrado poeta oficial de la Corte y protegido de
Felipe IV. En 1651 decide ordenarse sacerdote, impulsado por las
desgracias que ve a su alrededor. En 1653 lo nombran capellán de los
Reyes Nuevos de Toledo, donde Calderón fija su residencia. Desde
allí mantuvo relaciones con los intelectuales más prestigiosos de
España y comenzó un período de lectura de obras fundamentales, que
luego incorporó a su teatro: Sagradas Escrituras, Historia,
Teología, etc. Vuelve en 1663 a Madrid, al ser nombrado capellán de
honor del rey. De aquí hasta su muerte, el 25 de mayo de 1681, se
abre un período carente de hechos biográficos significativos.
Autor teatral
Calderón
cultivó todos los géneros y en sus autos
y comedias
expresa la filosofía, la historia, la mitología y el costumbrismo
de su época. Entre los autos sacramentales pueden destacarse: El
gran teatro del mundo,
La cena del rey
Baltasar,
La divina Filotea
y El divino Orfeo.
Sus comedias más representativas son El
alcalde de Zalamea, La vida es sueño, La hija del aire, El príncipe
constante
y La devoción de
la Cruz.
Muestra
en su obra un concepto de vida personal. Está a favor de la
monarquía absolutista; su estilo de vida es cortesano y
aristocrático; su religiosidad, contrarreformista, y su
nacionalismo, militar e imperialista.
Para Calderón la vida es un teatro, y el hombre un personaje de la representación. El mundo equivale a una feria o mercado, donde la vanidad y la gloria mundana son lo único que puede comprarse. Con estas ideas pesimistas y desengañadas se aproxima al existencialismo moderno, aunque opone al nihilismo actual la fuerza de la fe. Recuerda la necesidad de acudir a lo eterno, aunque no olvida la alegría de vivir.
Para Calderón la vida es un teatro, y el hombre un personaje de la representación. El mundo equivale a una feria o mercado, donde la vanidad y la gloria mundana son lo único que puede comprarse. Con estas ideas pesimistas y desengañadas se aproxima al existencialismo moderno, aunque opone al nihilismo actual la fuerza de la fe. Recuerda la necesidad de acudir a lo eterno, aunque no olvida la alegría de vivir.
Hasta
1635, su producción es parecida a la de Lope, pero a partir de aquí
sus personajes se hacen cada vez más estilizados y van perdiendo su
entidad humana para convertirse en símbolos de valor universal. La
realidad es más abstracta y en ella los personajes sostienen una
lucha íntima, agonista, entre su razón y su sentimiento. Se acentúa
el carácter simbolista, fantástico y poético y aumentan los
elementos plásticos y espectaculares para compensar la dificultad de
su pensamiento.
Influyó
hasta el siglo XVIII, donde el Neoclasicismo lo censuró con dureza.
A finales de dicho siglo, el Romanticismo alemán, a través de los
hermanos Schlegel (y más tarde Goethe) tradujeron y difundieron sus
obras. Los escritores del Modernismo y del Novecientos, sobre todo
Unamuno, reconocieron la importancia de su obra y de su pensamiento.
La vida es sueño (1635)
Argumento
La
obra comienza “in media res”, en lo alto de un monte con Rosaura
vestida de hombre, deshonrada y en busca de venganza por el rechazo
de Astolfo por su origen ilegítimo. Esta será una de las dos
historias de la obra. La otra gira en torno a Segismundo, un príncipe
encerrado por su padre, Basilio, por miedo a una profecía.
Segismundo, a pesar de actuar como un salvaje en ciertos momentos,
acaba siendo el rey y actúa con cordura.
Estructura
La
obra está dividida en tres jornadas:
-Jornada
I: Rosaura aparece con Clarín, en Polonia, con un objetivo claro:
recuperar la honra perdida. Conoce a Segismundo y Clotaldo, que le
cuenta lo que pasa con Segismundo, y luego quiere matarlos, hasta que
se da cuenta que es su hija. Ella, sin saberlo, le
cuenta que viene a deshacer un malentendido con Astolfo, que quiere
casarse con Estrella.
-Jornada
II: Clotaldo le cuenta al rey Basilio cómo han sacado a Segismundo
del castillo, dejándolo dormido con una bebida. Segismundo al
despertar piensa que está en un sueño, y comienza su estancia allí
dando problemas, por lo que es devuelto al castillo. Rosaura se
convierte en sirvienta de Estrella, y ambas son protagonistas de la
relación amorosa con Astolfo. Clotaldo hace creer a Segismundo que
la estancia en el palacio fue un sueño, y se produce un soliloquio de
Segismundo donde queda patente que la
vida es sueño.
-Jornada
III: El pueblo llano quiere a Segismundo como rey, y es rescatado de
la torre. Segismundo y sus tropas ganan, y Segismundo ante el rey se
comporta generoso y se arrodilla ante el. Gracias a esa actitud, el
rey le concede el trono. Segismundo decide que Astolfo se case con
Rosaura y él se casa con Estrella.
Cada
jornada se corresponde con el modelo presentación-nudo-desenlace.
Temas
Los
temas principales son la libertad del hombre y el fallo del destino.
Otros temas son la honra (en el personaje de Rosaura), el amor
(triángulo amoroso entre Rosaura, Astolfo y Estrella, que acaba
casada con Segismundo).
Personajes
Segismundo:
Es el hijo de Basilio, heredero al trono de Polonia. Por una profecía
que decía que sería despótico y cruel es encerrado en el castillo.
Cuando aparece por primera vez en el castillo, es soberbio y cruel,
por lo que vuelve al castillo. Es salvaje por no conocer los hábitos,
se comporta como una fiera siguiendo sus apetitos. Al final actúa
con nobleza, y es recompensando con el trono de Polonia (personaje
redondo). Segismundo representa la alegoría de la voluntad humana,
del libre albedrío que se impone a los designios de los astros.
Rosaura:
Es la hija de Clotaldo, y busca recuperar la honra perdida. Quiere
matar a Astolfo, pero al final cuando se aclara que tiene sangre
noble, puede casarse con él.
Clotaldo:
Es el padre de Rosaura y sirviente del rey Basilio, y está presente
en las dos tramas de la obra.
Basilio: Es el rey de Polonia y el padre de Segismundo. Su pasión por la Astrología y el futuro hace que encierre a su hijo en un castillo. Al final descubre que la voluntad del hombre se impone al destino. Para él, el destino estaba escrito, no podía cambiarse, pero se da cuenta que se equivocaba.
Basilio: Es el rey de Polonia y el padre de Segismundo. Su pasión por la Astrología y el futuro hace que encierre a su hijo en un castillo. Al final descubre que la voluntad del hombre se impone al destino. Para él, el destino estaba escrito, no podía cambiarse, pero se da cuenta que se equivocaba.
Astolfo:
Sobrino de Basilio, primo de Segismundo, quiere a Estrella para
conseguir el trono de Polonia, dejando atrás a Rosaura. Finalmente
se casa con Rosaura.
Estrella:
Sucesora del trono de Polonia, desconfía de Astolfo. Segismundo se
fijó en su belleza y al final de la obra se casan.
Clarín:
Es el gracioso, que trae juegos de palabra y comicidad.
Características
de la obra
El
principal mensaje de la obra es la importancia de la libertad del
hombre, que es el que manda en su propio destino; además de la
importancia de saber perdonar para sentir una paz interior.
Con
La vida es sueño,
Calderón acepta las reglas de Lope: lenguaje cuidado, uso del verso
en diferentes estrofas, paralelismos de tramas (la historia de
Segismundo y la de Rosaura).
A
través de Segismundo recupera el tópico modernista del “carpe
diem”, tan utilizado por Garcilaso. El personaje se descubre tanto
a sí mismo como a su alrededor, siendo consciente de que hay
disfrutar los momentos al máximo.
Influye
en esta obra el Mito de la caverna
de Platón, considerándose esta obra como una explicación
mitológica de La República.
También se observa influencia de poetas ascéticos del siglo XVI
como Fray Luis de León.
El
lenguaje es propio del Barroco, con carácter culto sin ser difícil,
con notas populares a través de Clarín. Nunca se prescinde de la
rima, y se utilizan seis estrofas: romances, redondillas, silvas,
décimas, quintillas y octavas reales. Algunas figuras literarias son
las siguientes:
-Metáfora:
“Va a los ojos a asomarse/ que son ventanas del pecho/ por donde en
lágrimas sale”
-Interrogaciones
retóricas: “¿No es antes/ que la vida y que el honor?”
-Exclamaciones
retóricas:”¡Ay triste!”
-Antítesis:
“Antes de nacer moriste”
-Epítetos:
“Obscura habitación, notable confusión, noble sangre”
-Arcaísmos:
“¡Ay. mísero de mí, y ay infelice!”
-Aliteración:
“que toda la vida es sueño, y los sueños sueños son”
-Hipérbaton:
“De una parte el amor propio y la lealtad de otra parte me rinden”
Bibliografía
CALDERÓN DE LA BARCA, Pedro, La vida es sueño, Madrid, Grupo Anaya, 2007
CALDERÓN DE LA BARCA, Pedro, La vida es sueño y El alcalde de Zalamea, México, Ediciones Prisma.
El Barroco
Panorama histórico
El
Barroco es un concepto histórico que define una época compleja,
nacida después del Renacimiento y que se prolonga hasta el siglo
XVIII. Su máximo apogeo llega entre dos fechas claves: 1598, muerte
de Felipe II, y 1681, muerte de Calderón de la Barca.
Los
orígenes del Barroco hay que buscarlos en el Renacimiento español y
más concretamente en el reinado de Carlos V (1515-1556), el cual
resucitando las viejas formas clásicas de gobierno se corona
emperador y pretende aunar en su mando la unidad religiosa y militar.
Situación social
Ante
el desarrollo de los talleres
artesanales
o de tipo fabril, gran parte de la población rural se traslada a las
ciudades. Son gentes que formarán un colectivo social heterogéneo y
anónimo del que es lógico que se generen grandes conflictos. El
individuo adopta actitudes de egoísta autodefensa y el
individualismo se hace fórmula constante de comportamiento. Se
potencia así la soledad -física y existencial- y se asumen
actitudes de agresividad hacia el otro. Se adopta el aforismo de
Hobber: “el hombre es un lobo para el hombre”.
La
iglesia se encarga de una labor de recuperación de la fe a través
de los artistas, instándoles a que inciten el amor a Dios a través
de sus obras. Ello explica el auge de la imaginería, de los autos
sacramentales, piezas dramáticas escritas para la Eucaristía y cuyo
principal creador fue Pedro Calderón de la Barca.
Situación
general de la literatura barroca
Gran
parte de la literatura barroca es prolongación de la renacentista.
Géneros, temas y fuentes de inspiración son aprovechadas por los
autores barrocos que, sin embargo, incorporan elementos
distintivos.
En la novela, la visión de la realidad se hace más cruda. El idealismo aún presente en el Qujote, se rompe a favor de una sátira cruel y despiadada, como en El buscón de Quevedo. Aparecen multitud de obras burlescas; se hace sátira irreverente de las más conmovedoras historias de la tradición clásica.
En la novela, la visión de la realidad se hace más cruda. El idealismo aún presente en el Qujote, se rompe a favor de una sátira cruel y despiadada, como en El buscón de Quevedo. Aparecen multitud de obras burlescas; se hace sátira irreverente de las más conmovedoras historias de la tradición clásica.
La
poesía abandona el equilibrio general entre la forma y lo que a
través de ella se expresa, para centrarse fundamentalmente en el
primer aspecto. Se busca el detalle, el efecto formal aislado, como
vemos en los poemas mayores de Góngora.
El
auge del teatro
A
diferencia del Renacimiento, que no dio especial relevancia al
teatro, el Barroco es el período de máximo desarrollo de este
género. Este género se convierte en el mejor vehículo educativo y
toda la sociedad se ve reflejada en él. Se identifican con los
personajes, sueñan con sus fantasías, aprenden el valor de la
justicia, del honor social, de la autoridad monárquica, del dogma
católico... Del teatro extrae el hombre barroco orientaciones para
su vida y, a través de él, aprende que el triunfo solo se alcanza a
través del ingenio, la malicia, la prudencia y el disimulo.
En
el Barroco aparecen los “corrales” de comedias, donde se daba
vida a obras de carácter popular, con un público heterogéneo y
ávido de espectáculo. Otro tipo de teatro era el eclesiástico,
realizado normalmente en conventos de órdenes como los jesuitas; era
un teatro culto, de temática religiosa y generalmente escrito en
latín.
Por
último, había un teatro que se daba en la Corte, recurriendo a todo
tipo de obras de ingeniería y maquinaria (tramoyas) que asombraban
al espectador con sus efectos inesperados. De este tipo de teatro
surgieron las primeras óperas y zarzuelas españolas.
Los
temas del barroco
Los
temas más frecuentes son aquellos que manifiestan la concepción
barroca de la existencia. Destacan los siguientes:
-El
tiempo, raíz última de todos los problemas, pues su paso acaba con
todo.
-La
muerte, considerada como
experiencia individual y unida con el miedo al más allá.
-El
sueño, que representa tanto la vida como la muerte.
-El
amor, único elemento humano capaz de pervivir más allá de la
muerte y que impulsa al hombre hacia lo positivo.
-La
soledad, sentimiento constante que se desprende de los temas
anteriores y recibe diferentes interpretaciones.
Junto
a estos temas, en perfecta armonía, aparecen los opuestos del
Renacimiento. La Naturaleza y cada parte que la integran se vuelve
tema frecuente; la luz y el color aparecen mediante descripciones y
adjetivaciones exuberantes.
Dada
la complejidad y variedad de la época, se dan en ellas todas las
posibilidades expresivas, desde la sencillez popular a la más
difícil artificiosidad, basada esta en la asociación de ideas
(conceptismo) o en el valor de la palabra (culteranismo).
Las
complicaciones formales, la dificultad de las metáforas, los juegos
de palabras, las alusiones, las elipsis, los símbolos, caracterizan
las obras literarias barrocas y responden todas ellas a un mismo
objetivo: llamar la atención de una sociedad deseosa de conmoción y
sorpresa.
Bibliografía
CALDERÓN
DE LA BARCA, Pedro, La vida es sueño,
Madrid, Grupo Anaya, 2007
CALDERÓN
DE LA BARCA, Pedro, La vida es sueño y
El alcalde de Zalamea,
México, Ediciones Prisma.
Nota del autor de "10 euros la copa" sobre su obra
De los muchos misterios de la vida el que más me apasiona es el de las
relaciones humanas: nuestras formas de convivir, de mandarnos emociones
y palabras unos a otros, de dejarnos inundar por ese agua para nuestra sed
que mana del otro que está a nuestro lado. Nada existe si no podemos
contarlo, y las principales emociones y pasiones que sentimos están
provocadas por los demás. El amor, el deseo, la amistad, la felicidad, la
soledad, la búsqueda de los demás para poder ser nosotros mismos...
He empleado el humor, como en tantas de mis obras, para poder hablar de esta cuestión de la convivencia (tal vez la más importante de nuestra
época) de una manera cercana y festiva. Somos lo que recibimos de los
demás, y está bien que acojamos todo eso que nos llega de fuera como el
más hermoso regalo que nos da la vida, y nos entregan los que se sientan a nuestro lado a comer, los que nos hablan, los que nos miran, los que nos sienten, los que nos escuchan...
He empleado el humor, como en tantas de mis obras, para poder hablar de esta cuestión de la convivencia (tal vez la más importante de nuestra
época) de una manera cercana y festiva. Somos lo que recibimos de los
demás, y está bien que acojamos todo eso que nos llega de fuera como el
más hermoso regalo que nos da la vida, y nos entregan los que se sientan a nuestro lado a comer, los que nos hablan, los que nos miran, los que nos sienten, los que nos escuchan...
Tráiler de la obra "10 euros la copa"
Os dejo el enlace del tráiler de la obra "10 euros la copa". Espero que os guste y si podeis os animeis a asistir a una de sus representaciones.
http://www.youtube.com/watch?v=l126AYMOSdI
http://www.youtube.com/watch?v=l126AYMOSdI
domingo, 26 de mayo de 2013
La vida es sueño
Estructura
y sentido
Los dramaturgos del siglo XVII se limitaban a
dividir la obra en tres jornadas o actos.
-
Primer Jornada
Los versos 1- 277 construyen la primera jornada: La vida es sueño comienza de manera
abrupta, in media res, sin antecedentes explícitos que expliquen al espectador
lo que ha sucedido antes. Nada más entrar en escena, Rosaura describe el monte
en que se encuentra y la torre a la que llega. Las descripciones están cargadas
de simbolismo, en el que la naturaleza y el hombre se funden mediante la
personificación.
Desde en un principio se aprecia la estrecha
relación entre ambas intrigas.
Cuando aparece Clotaldo se produce un corte en la
acción.
La escena V es un dialogo entre Astolfo y Estrella
en la que vemos su discordia por el trono.
El honor constituye el tema de la conversación entre
Clotaldo y Rosaura en la última escena.
-
Segunda Jornada
Está dividida en cuatro escenas que se dividen en
los versos 1223, 1723 y 2017
La prueba de Segismundo en el centro de la jornada. Duda
si lo que está viendo es sueño o realidad, Cleotaldo le cuenta la verdad y él
reacciona de forma violenta.
Las escenas XI a XVI desarrollan una parte de la
segunda intriga. El honor, los celos, el enredo y la suspensión se combinan
para crear una curiosa y entretenida escena mayor.
En las últimas escenas se vuelve a la torre, donde
sigue encerrado Segismundo. Es el momento clave de la estructura y del
significado de la obra, en el que Segismundo reflexiona sobre su experiencia.
-
Tercera Jornada
Corresponde al desenlace y en ella finalizan las dos
intrigas y los problemas de los personajes, no todos solucionados. Podríamos dividirla
en seis escenas.
Esta jornada comienza con un contrapunto cómico,
característico de Clarín, que aporta una nota más seria, más grave.
Cuando ya se sabe quién es Segismundo se pone en
marcha la segunda prueba, una segunda oportunidad no prevista.
El comienzo de la guerra es el tema de las escenas V
a VII. La naturaleza refleja simbólicamente
la alteración de los hombres.
En la escena VIII vuelve la deshonra de Rosaura. Ante
las presiones de su hija, Clotaldo duda sobre la actitud que debe tomas.
En las últimas escenas, se da el verdadero
desenlace, se resuelven todos los conflictos y nos percatamos de que La vida es sueño se nos habla de un
doble aprendizaje: el del príncipe y el del rey.
Temas
La
vida es sueño es una comedia de enorme densidad
conceptual y temática, pero la coherencia y armonía de que Calderón dotaba sus
obras hacen que la variedad temática que ofrece esta obra se integre en una
unidad racional, en que los temas y motivos se interrelacionan de manera
estrecha.
El tema predominante es el que se da en el título de
la obra, la vida como sueño; que es coherente con la concepción del mundo como
teatro, de la naturaleza como un libro y de Dios como autor
La vida y la muerte también aparecen en numerosas
ocasiones indiferenciadas. También aparecen el destino y el libre albedrío.
En las obras dramáticas del Siglo de Oro siempre se
lucha por el amor y el honor.
Personajes
- Segismundo:
víctima inocente del erros de su padre, su consiguiente actitud de rebeldía, su
personalidad ambivalente de hombre-fiera, lo que explica sus reacciones
violentas, despótica y de soberbia.
-
Rosaura:
queda evidente su herramienta en la desgracia con Segismundo y su decidida
voluntad de recuperar su honor perdido
-
Basilio:
destacamos su responsabilidad directa en el abandono de su hijo, de donde se
derivan buena parte de los conflictos que desarrolla esta obra.
-
Clotaldo:
aparece siempre escindido siempre entre su lealtad al rey Basilio y el amor por
su hija
-
Astolfo:
destaca por sus ansias de poder, que vemos evidente desde su primer encuentro
con Estrella
-
Estrella:
es un personaje meramente instrumental
-
Clarín:
es listo y está orgulloso de su listeza.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)